google.com, pub-4869754641634191, DIRECT, f08c47fec0942fa0 La Bitácora de Jenri: Zaragoza
Mostrando entradas con la etiqueta Zaragoza. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Zaragoza. Mostrar todas las entradas

31 de octubre de 2023

Acuerdo para ejecutar la primera fase del Plan Director de Bílbilis en Calatayud (Zaragoza)

El Instituto del Patrimonio Cultural España, el Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de Calatayud han concretado las actuaciones a realizar en los próximos meses en el yacimiento romano para retomar las visitas lo antes posible. El montante total de este proyecto de ejecución en sus diferentes fases supera los 4,2 millones de euros.
En el encuentro han participado representantes del Gobierno central, del Ejecutivo aragonés y del Ayuntamiento de Calatayud.

El Plan Director del yacimiento arqueológico de la ciudad romana de Bílbilis se pondrá en marcha en los próximos meses con diferentes actuaciones incluidas en la primera de sus fases. Así se ha acordado en una reunión de trabajo celebrada en la ciudad de Calatayud y a la que han asistido representantes del Gobierno central, del Ejecutivo aragonés y del consistorio bilbilitano.

En el encuentro han participado la subdirectora general del Instituto del Patrimonio Cultural Español (IPCE), Susana Alcalde, y la jefa del servicio de Arquitectura, Olga Roldán; la directora general de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón, Gloria Pérez, junto a técnicos de este departamento; el alcalde bilbilitano, José Manuel Aranda, el concejal de Urbanismo y primer teniente de alcalde, José Manuel Gimeno, el concejal delegado del Museo de Calatayud, Arturo Ballano, y la jefa del Área de Cultura, Pilar Trell. En la reunión, celebrada este lunes, también han estado el subdirector del yacimiento de Bílbilis y del Museo, Carlos Sáenz, así como el arquitecto Javier Borobio y la aparejadora de BAU Estudio de Arquitectura y Urbanismo, Clara Borobio.

El objetivo de esta mesa de trabajo, que ha tenido lugar en el Museo de Calatayud, era activar las diferentes fases que componen el Plan Director de este conjunto patrimonial arqueológico. La primera de ellas se centra en las intervenciones precisas para que el yacimiento sea visitable cuanto antes en condiciones de seguridad, tanto para las personas como para los bienes que lo componen.

Incluye la retirada, reparación y sustitución de algunos elementos como vallas y elementos de señalización y protección obsoletos. La mejora e incorporación de señalética, de paneles informativos y marcas de recorridos por la antigua ciudad romana para ordenar las visitas. La finalidad de esta intervención inicial es acondicionar el yacimiento haciéndolo accesible y seguro para que pueda recorrerse de forma ordenada.

La directora general de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón, Gloria Pérez, ha subrayado que el compromiso entre las tres administraciones permitirá coordinar esfuerzos para “salvaguardar el yacimiento de la ciudad romana de Bílbilis a través de una serie de medidas de seguridad que se contemplan en esta primera fase”. Con estas primeras acciones se desea salvaguardar el yacimiento y “darle el protagonismo que tuvo esta ciudad romana, para que todos los visitantes la puedan disfrutar”.

Proyecto muy necesario
Las tres administraciones implicadas en la ejecución de este Plan Director han manifestado su compromiso para que, a partir de este momento, se dé continuidad al resto de las siguientes fases hasta completar las siete en las que se estructura. “Ha sido un encuentro en el que todos hemos compartido que tiene que ser el inicio de un proyecto muy necesario y deseado, aunque sea largo, que permitirá recuperar un patrimonio de primer orden no sólo para Calatayud”, ha manifestado el alcalde bilbilitano, José Manuel Aranda.

Asimismo, se ha decidido la puesta en marcha de una comisión de seguimiento que velará por la coordinación y la gestión de los trabajos que de ahora en adelante van a ejecutarse. Como ha explicado el concejal delegado de Yacimientos, Arturo Ballano, esta ciudad romana está en la identidad de los bilbilitanos, y “los hallazgos y las investigaciones que han visto la luz a lo largo de los años demuestran la relevancia que tuvo en su época y que queremos que recupere como conjunto arqueológico”.

El Plan Director del Yacimiento Arqueológico de la Ciudad Romana de Bílbilis persigue consolidar, proteger y musealizar las estructuras centrales y de varios sectores de esa zona para su contemplación, visita y comprensión. El montante total de este proyecto de ejecución en sus diferentes fases supera los 4,2 millones de euros.
(Fuente: Aragón Hoy)

26 de octubre de 2023

Hallan los restos de un banquete de época romana en el yacimiento de Los Bañales

Los arqueólogos documentan en el yacimiento romano de Los Bañales de Uncastillo (Zaragoza) un lujoso convite a base de ostras celebrado poco antes del abandono del sitio.
Detalles del vertido de ostras documentado sobre la calle de Los Bañales de Uncastillo, durante su excavación.

La ciudad romana de Los Bañales de Uncastillo, en el área occidental de la provincia de Zaragoza, constituyó una importante encrucijada viaria en la ruta entre la propia Caesar Augusta y el sur de Francia. Seguramente alcanzó el rango de municipio en época de la dinastía Flavia y su ocupación se prolongó hasta una notable crisis en la primera mitad del siglo III d.C. En alguno de esos momentos finales del asentamiento, se celebró en la domus de uno de los barrios residenciales un banquete privado con abundancia de ostras, un manjar cuyo consumo significaba un elemento de distinción social.

Al término del convite, las conchas de las ostras, y tal vez otros restos orgánicos, fueron arrojadas sobre la acera del cardo oriental de la ciudad, en su parte norte, que delimitaba el barrio septentrional y llevaba un tiempo en desuso. Aquella zona se había convertido en una suerte de basurero, a donde se arrojaban residuos desde algunas de las viviendas aledañas, como bien revela la abundante presencia de material mueble de vajilla doméstica. Todos estos hallazgos salieron a la luz durante unas excavaciones en el yacimiento en el año 2021.

Pero el depósito inédito de ostras, que pertenecen a la especie Ostrea edulis, la ostra común, europea o plana, como se le conoce popularmente, se ha dado a conocer ahora en un estudio arqueomalacológico publicado en la revista SPAL, de la Universidad de Sevilla, y firmado por los investigadores Darío Bernal-Casasola, Javier Andreu Pintado y Juan Jesús Cantillo Duarte.

El análisis del conjunto de conchas, que presentan un buen estado de conservación y pertenecen a un número mínimo de 71 individuos, fueron con bastante seguridad recolectadas dentro de su medio natural costero y no producto de un criadero. No obstante, aunque la ciudad de Los Bañales estuvo totalmente abierta a los influjos mediterráneos en cuestiones arquitectónicas, como la procedencia de los mármoles, no ha sido posible determinar su lugar de origen.

Es una incógnita si las ostras, que tenían un tamaño reducido, fueron enviadas desde el Cantábrico, quizá desde el puerto de Oiasso (Irún, Guipúzcoa), o si llegaron a través del Mediterráneo, puede que desde Tarraco (Tarragona), aprovechando la navegabilidad del río Ebro. En cualquier caso, los investigadores recuerdan que estos moluscos pueden aguantar vivos en condiciones normales 12 días fuera del agua, lo que permitía su transporte a cualquier lugar de la Península Ibérica.

Hábitos itálicos
La sociedad romana sentía veneración por el consumo de ostras: su presencia en los convites era omnipresente y su consumo un elemento de distinción social. Los autores del estudio señalan cuatro factores interrelacionados para interpretar el conjunto del yacimiento zaragozano como los vestigios de un banquete o convivium. El primero de ellos es la cercanía de las conchas a una domus. "Se trataría de restos de comida descartados tras su consumo en uno de los solares vacantes del entorno de estas ricas viviendas urbanas, que habría generado un vertedero de los llamados 'no seleccionados', donde se entremezcló la materia orgánica y la inorgánica", escriben.

En este sentido, la presencia de vajilla fina de mesa, elaborada tanto con terra sigillata como con cerámicas engobadas, refuerzan la hipótesis de que se trataría de residuos relacionados con el consumo de bebidas y otros productos, y no simples desperdicios del procesado de alimentos. La cantidad de ostras también revelan la imposibilidad de que se trate del manjar de una sola persona —los investigadores barajan que en el banquete participaron mínimo seis individuos—. En último lugar, destacan que la ubicación de esta ciudad en el interior del área vascona, alejada varios centenares de kilómetros de las costas atlántica y mediterránea, dotan a estos recursos marinos de "un carácter exótico, una auténtica exquisitez si tenemos en cuenta la lejanía de su zona de hábitat".

"En un ámbito natural su presencia no ha de considerarse per se como un elemento de prestigio debido a su accesibilidad y posible reducido precio", reconocen en el artículo. Sin embargo, en localidades del interior, vinculadas a centros urbanos y villas de alto rango, "debieron incrementar notablemente su precio, haciéndolas asequibles únicamente para las clases dirigentes". En el caso de Los Bañales, el manjar de ostras fue una forma de demostrar su romanitas y de emular las tradiciones itálicas en la provincia de Hispania.

Aunque en otros yacimientos de la Península Ibérica se han documentado restos de esta especie de moluscos, el único paralelo de banquete similar se ha identificado en la ciudad de Baelo Claudia (Cádiz), en el área del estrecho de Gibraltar. En este posible convivium celebrado en el siglo I d.C., además de bivalvos se bebió el afamado vino itálico. "Ambos restos de banquetes evidencian con claridad que el consumo de ostras en Hispania como elemento de distinción social debió ser generalizado, como sabemos que así era en la Urbs y en muchos otros enclaves itálicos, pues los dos ejemplos traídos a colación fueron, pese a sus estatuto municipal, comunidades de segundo o tercer rango", destacan en sus conclusiones.

21 de julio de 2023

Desentierran en Zaragoza el foro romano más antiguo de la Península Ibérica

Se trata del foro más antiguo encontrada en el interior de la península ibérica hasta la fecha y supone un avance en los conocimientos de la arquitectura romana en Hispania. Se encuentra en el yacimiento arqueológico de La Cabañeta (Zaragoza) ubicado en una ciudad sin nombre que data del siglo II a.C.
Yacimiento La Cabañeta. EFE/ Universidad de Zaragoza/Alberto Mayayo Catalán

Finalizada la campaña de excavación realizada en el importante yacimiento de la Roma republicana, La Cabañeta (El Burgo de Ebro, Zaragoza), un grupo de arqueólogos ha descubierto un foro romano que data ser el más antiguo encontrado, no solo en España, sino en toda la Península Ibérica, según ha informado la Universidad de Zaragoza. Ha sido hallado en un espacio público en una ciudad fundada en el último tercio del siglo II a.C. y cuyo nombre aún se desconoce.

El inicio de este proyecto arqueológico tuvo lugar a principios de este mes de julio tras una década de interrupciones. Los encargados de la dirección de la excavación son el investigador e historiador Borja Díaz Arió y el arqueólogo Alberto Mayayo Catalán.

"Se trata de un hallazgo de excepcional importancia, no sólo por sus dimensiones y complejidad arquitectónica, sino por tratarse de la plaza forense más antigua encontrada en el interior de la península ibérica hasta la fecha, cuyo descubrimiento contribuirá a transformar de manera radical nuestro conocimiento de la fase inicial de difusión de los modelos arquitectónicos romanos en Hispania", ha explicado Borja Díaz a EFE.


La ciudad sin nombre muy probablemente fue destruida de forma violenta, según han explicado los investigadores, durante las Guerras Sertorianas en la segunda mitad del siglo I a.C.

La excavación de este año se ha ocupado de la parte central del yacimiento, donde se han localizado los restos de una enorme plaza enmarcada por un pórtico doble cubierto con tejas de cuidada factura al que se abren una serie de habitaciones -tabernae-, tal vez destinadas a actividades de carácter comercial.

"Este dramático acontecimiento ha contribuido a convertirla en uno de los yacimientos clave para el conocimiento de la presencia romana en el interior de la península ibérica en la fase inmediatamente posterior a la derrota de los celtíberos en Numancia", ha opinado el director del proyecto sobre el importante descubrimiento.

La Cabañeta
Las excavaciones realizadas en este yacimiento -catalogado como Bien de Interés Cultural- se llevan a cabo desde los 2000 gracias al empeño del arqueólogo Antonio Ferreruela Gonzalvo y del profesor de la Universidad de Valladolid José Antonio Mínguez Morales.

Estas muchas campañas de excavación han permitido sacar a la luz los restos de un interesante edificio de almacenes, probablemente utilizado como sede de una asociación de mercaderes itálico y unos baños públicos acompañados de una gran palestra, que se cuentan entre los conjuntos termales romanos de época republicana mejor conservados de todo el Mediterráneo occidental.

30 de marzo de 2023

Los restos hallados en Velilla de Ebro pertenecen al foro de la ciudad romana

Concluida la excavación arqueológica, el Ayuntamiento de la localidad zaragozana busca financiación para seguir la investigación y poner en valor los vestigios. Entre los restos encontrados en los primeros días de excavación destacaba parte del fuste de una columna de grandes dimensiones (118 por 53 centímetros), lo que apuntaba ya a que se había dado con un edificio público monumental de época romana. También salieron a la luz sillares de grandes dimensiones.
Vista general de las excavaciones arqueológicas en la plaza de España de Velilla de Ebro.Francisco Javier Gutiérrez.

Los restos arqueológicos encontrados en los últimos días en la localidad zaragozana de Velilla de Ebro corresponden, casi sin lugar a dudas, al foro de la ciudad romana. Así lo aseguraba este miércoles Francisco Javier Gutiérrez, arqueólogo que ha dirigido los trabajos. "La monumentalidad y características de los vestigios nos hacen pensar en el foro -asegura-. Es lo más probable. Otras posibilidades, como la de que fuera un templo a la entrada de la ciudad, parecen más remotas".

Hace unos días, las catas arqueológicas que se realizaron en la plaza de España de Velilla de Ebro, que va a ser remodelada, sacaron a la luz restos de un edificio monumental de época romana. Los trabajos se pararon de inmediato a la espera de que arqueólogos del Gobierno de Aragón comprobaran la importancia de lo aparecido, y se retomaron poco después, ampliando la zona de excavación.

Velilla de Ebro tiene en su término municipal el yacimiento de Celsa, una de las colonias romanas más importantes del valle del Ebro, tanto que llegó a acuñar moneda propia.

Entre los restos encontrados en los primeros días de excavación destacaba parte del fuste de una columna de grandes dimensiones (118 por 53 centímetros), lo que apuntaba ya a que se había dado con un edificio público monumental de época romana. También salieron a la luz sillares de grandes dimensiones. En los últimos días, "hemos sacado cimentaciones de hasta tres metros de profundidad y materiales importados directamente de Italia, como un fragmento de piedra de molino para cereal realizado sobre piedra volcánica de Italia -añade Francisco Javier Gutiérrez-. También hemos encontrado un fragmento del revestimiento de mármol de las paredes. Todo esto nos indica que la fundación de la colonia se hizo con bastante dinero".

Rosario Gómez Puyoles, alcaldesa de Velilla de Ebro, está buscando soluciones para que la excavación arqueológica se amplíe y, además, para que los restos se conserven, integrados en la plaza. "Nuestra idea es que siga habiendo una plaza pública para disfrute de todos los vecinos, pero que los restos se conserven y sean accesibles desde el sótano -señala-. La aparición de estos restos es una buena noticia para Velilla pero no está exenta de complicaciones, porque somos un pueblo de 200 habitantes y nuestras posibilidades son las que son. Vamos a buscar financiación para hacer un proyecto interesante y que equilibre la plaza y la puesta en valor de los vestigios. Los restos encontrados son muy importantes y constituyen una de nuestras señas de identidad de nuestro pasado romano".

20 de marzo de 2023

Hallan en Villanueva de Huerva un yacimiento de grabados rupestres

Se han contabilizado hasta 79 figuras talladas en la roca, con diversas formas y pertenecientes, según un estudio arqueológico, a diferentes épocas históricas, desde la protohistoria hasta el periodo contemporáneo
Algunas de las figuras talladas en roca que se han estudiado.H. A.

El entorno de Villanueva de Huerva (Zaragoza) no es que esconda sorpresas hasta debajo de las piedras, es que las guarda a plena vista. Es el caso del yacimiento de grabados rupestres encontrado en el llamado barranco del Pinar, a unos cuatro kilómetros del casco urbano de la localidad.

En este paraje se ha descubierto una auténtica joya. Se han contabilizado hasta 79 figuras talladas en la roca, con diversas formas y pertenecientes, según un estudio arqueológico, a diferentes épocas históricas, desde la protohistoria hasta el periodo contemporáneo.

Para estudiar estas muestras, el arqueólogo Héctor Arcusa, por petición del Ayuntamiento y con la supervisión del entonces coordinador del inventario de Arte Rupestre de Aragón y parte de la Dirección General de Patrimonio de la DGA, José Ignacio Royo, realizó un trabajo exhaustivo de documentación sobre las muestras que en la zona eran conocidas popularmente como 'las herraduras del caballo de Santiago'.

Además de esas formas características y predominantes -de las que se han registrado un total de 36 ejemplos-, también se ha constatado la existencia de tres tipos de círculos: siete simples, cuatro concéntricos y uno con cazoletas (oquedades) en el interior. A esos se añaden diez muestras cruciformes y hasta siete motivos que representan letras, incluido un nombre completo.

Según Arcusa, a estas particulares inscripciones les han atribuido "una posible relación cronológica a modo de hipótesis inicial, a falta de una investigación más rigurosa". Así, creen que el origen de las más antiguas arrancaría en la protohistoria (periodo de transición entre la Prehistoria y el comienzo de la Historia) hasta la época contemporánea, cuando se pudieron llevar a cabo los últimos grabados, pasando por la Edad Media y Moderna.

"Un panel interesante"
"Sin lugar a dudas estamos ante un panel interesante, tanto por las figuras como por su número, así como por su ubicación: convirtiéndose en una de las pocas manifestaciones de este tipo en el entorno inmediato de Zaragoza hasta la fecha", defiende el experto. Una de las pocas pistas que han podido recoger es que uno de los grabados en forma de cruz se superpone sobre un círculo, por lo que el primero sería posterior al segundo.

Inventario aragonés
Todo este proceso se inició gracias a los hermanos Borja y Cristina Gómez y a Izarbe Cebrián, que comunicaron a Jesús Martín, dinamizador y responsable del Centro de Interpretación Dinosaurios de Zaragoza, quien observó la mano del hombre detrás de las particulares marcas.

En este punto el Ayuntamiento de Villanueva de Huerva encargó el informe para respaldar su inclusión en el inventario aragonés, a lo que se añade la inversión para la musealización de la zona, con la instalación de cartelería y una plataforma.

De esta forma se protegerían estos grabados rupestres y se facilitaría que pudieran ser visitados. Villanueva de Huerva acoge el primer museo dedicado exclusivamente a los dinosaurios en la provincia de Zaragoza, que abrió sus puertas en abril del año pasado.

15 de marzo de 2023

Salen a la luz los restos de un edificio romano monumental en Velilla de Ebro (Zaragoza)

El hallazgo de una columna de grandes dimensiones apunta a que podría haberse localizado el foro de la ciudad
Cata arqueológica donde han aparecido los restos. Francisco Javier Gutiérrez.

Una cata arqueológica en la plaza de España de la localidad zaragozana de Velilla de Ebro ha sacado a la luz los restos de un edificio monumental de época romana. Los vestigios aparecieron el pasado viernes y, dada su importancia, un arqueólogo del Departamento de Educación y Cultura visitó ayer la obra para realizar un informe.

"Queremos remodelar la plaza de España, donde está el Ayuntamiento, y por eso hemos realizado las catas. Cuando hemos visto lo que aparecía hemos parado los trabajos de inmediato –aseguraba este martes la alcaldesa de la localidad, Rosario Gómez Puyoles–. Nuestra intención es ampliar la excavación porque todo indica que en la zona donde no se ha trabajado aún aparecerán más restos de interés histórico". Pero ello dependerá de encontrar la financiación adecuada.

Velilla de Ebro tiene en su término municipal el yacimiento de Celsa, una de las colonias romanas más importantes del valle del Ebro, tanto que llegó a acuñar moneda propia.

Los trabajos arqueológicos han sido dirigidos por Francisco Javier Gutiérrez. Entre lo que ha salido a la luz se encuentra parte del fuste de una columna de grandes dimensiones (118 por 53 centímetros). Eso apunta a que corresponde a un edificio público monumental y, dado que hasta ahora no se habían encontrado restos de este tipo en el municipio, ya hay quien habla de que se ha localizado el foro de la ciudad romana. Ni Francisco Javier Gutiérrez ni Rosario Gómez quieren hablar de esta posibilidad, aunque no la descartan. "Hemos hecho tan solo dos catas, la última, donde han aparecido los restos, de 6 por 3 metros –señala el arqueólogo– . No se puede hablar aún de foro". También han aparecido sillares de grandes dimensiones. Por las cerámicas encontradas, los restos se pueden fechar en torno al cambio de era.

"Somos conscientes de que los restos pueden incrementar el atractivo cultural y turístico de la localidad, pero para ello hay que seguir trabajando", concluía Rosario Gómez.

15 de noviembre de 2022

Se derrumba un tramo de muralla del monasterio de Santa Fe (Zaragoza)

Los vecinos del barrio zaragozano denuncian el abandono del recinto monacal, que en 2017 ingresó en la Lista Roja de Patrimonio
Tramo de la muralla que se ha desplomado. FOTO: ASOCIACIÓN DE VECINOS DE SANTA FE

El revestimiento exterior de un tramo de la muralla del monasterio de Santa Fe de Zaragoza se derrumbó este domingo por la tarde. La asociación de vecinos de este barrio zaragozano denunció que la caída de este muro responde al "estado de abandono y deterioro" que presenta todo el recinto monacal, que se encuentra entre Cadrete y Cuarte de Huerva. Una situación que ha podido verse agravada por las lluvias caídas los últimos días. "La muralla estaba algo abombada y ha terminado desprendiéndose una parte", explicaron desde el colectivo vecinal.

El monasterio fue declarado Monumento Histórico Artístico en 1979, hoy Bien de Interés Cultural (BIC), aunque esta protección solo afecta a la portería (que tiene dos propietarios) y a la iglesia (que pertenece a otros dos dueños). El Gobierno aragonés se negó hace un tiempo a ampliar esta declaración. En el interior del monasterio hay una veintena de viviendas cada una con su dueño.

La asociación vecinal reclamó la intervención de Patrimonio de la DGA para "evitar que un particular lo repare de una forma inadecuada". Hasta ahora el Ejecutivo, con competencias en Patrimonio, se ha mostrado renuente a intervenir hasta en las zonas BIC, alegando que son propiedad privada. La Asociación Cultural Monasterio de Santa Fe ha reclamado en más de una ocasión un plan especial de ordenación urbana.
(Fuente: Heraldo)

22 de septiembre de 2022

Aparece una nueva muralla en Cabeza Ladrero

La campaña de excavación llevada a cabo en el yacimiento de las comarca aragonesa de las Cinco Villas ha revelado una estructura que alcanza cerca de los 230 centímetros de anchura, de la que se han conservado las primeras hiladas que corresponderían a la parte de la cimentación y primeras alturas. 
Imagen de la excavación en el yacimiento cincovillés. COMARCA DE LAS CINCO VILLAS

El yacimiento cincovillés de Cabeza Ladrero sigue dando sorpresas y, recientemente, se han conseguido encontrar los restos de una muralla realizada con sillares de gran tamaño. Este elemento ha surgido en una nueva zona de excavación, ubicada al este de la necrópolis allí localizada, donde se veían unos sillares de gran tamaño que parecían formar parte de un muro, que posee un metro de anchura.

Se trata de una construcción del tipo "de relleno. Es decir, a semejanza de un sándwich, y estaría formada por dos lienzos exteriores hechos con sillares de gran tamaño, sobre todo el exterior, que serían el equivalente al pan de molde, y el espacio entre ambos se rellenaría con material de diverso tipo, que, en este caso se realiza a base de hiladas superpuestas de sillarejo de tamaño pequeño y mediano de las que hemos podido contabilizar hasta cinco”, explica Ángel Jordán, director de la excavación.

Todo el conjunto forma una estructura que alcanza cerca de los 230 centímetros de anchura, de la que se han conservado las primeras hiladas, hasta un máximo de cinco, que corresponderían a la parte de la cimentación y primeras alturas. “Además, que es lo más sorprendente, hemos podido confirmar la presencia de esta estructura durante al menos 40 metros, incluyéndose, quizás, una posible torre”, precisa el experto.

La presencia de esta construcción en Cabeza Ladrero no sólo es interesante por sí misma, sino también “porque constituye un elemento urbanístico de primer orden, ya que, hasta ahora, sólo habíamos encontrado dos pequeños tramos de calles”, dice Jordán. Este elemento muestra la potencia económica que tenía esta ciudad en el momento de su construcción que, “debió de ser grande. Todavía la estamos estudiando, por lo que aspectos como su cronología no los tenemos cerrados”, puntualiza el arqueólogo. En este sentido, se ha podido detectar que en época romana alto imperial se realizó una importante intervención de aterrazamiento de la colina en esta zona, “construyéndose al menos tres habitaciones de características desconocidas”, indica Ángel Jordán. Del mismo modo, en lo que afecta a la muralla encontrada, “es factible pensar que su cronología puede ser temprana, o bien de los primeros momentos de la presencia romana en la ciudad”, concluye el director de la excavación.

Importancia del yacimiento
El yacimiento arqueológico de Cabeza Ladrero se sitúa muy cerca de la localidad cincovillesa de Sofuentes. Durante todo el verano se ha realizado una exhaustiva campaña de excavación con dieciséis estudiantes en formación que ha permitido ir realizando múltiples trabajos en ella.

El proyecto de Cabeza Ladrero nació en 2016 y, desde entonces, ha seguido impulsándose con diferentes campañas que han permitido seguir conociendo la necrópolis existente en la zona. Conscientes del potencia histórico, artístico y turístico de este yacimiento, la Comarca de Cinco Villas rubrica para su impulso y descubrimiento un acuerdo de colaboración dotado de 16.000 euros -con cargo a los presupuestos anuales de la entidad- para que puedan seguir impulsándose fases y formando a estudiantes. Un tipo de colaboración que la comarca también rubrica con la Fundación Uncastillo, gestora del proyecto que se está desarrollando en el yacimiento de Los Bañales, otro de los enclaves romanos por excelencia de la comarca.

5 de noviembre de 2021

Expertos de toda Europa debatirán en Zaragoza sobre el expolio arqueológico

Las jornadas, organizadas con motivo del regreso a España de los cascos celtíberos de Aranda de Moncayo, se celebrarán entre el 10 y el 12 de diciembre

Los máximos responsables de Patrimonio Histórico de Interpol y Europol, los jefes de las unidades correspondientes de la Guardia Civil y la Policía Nacional, fiscales especializados y otras especialistas de Roma, Maastricht o Venecia, se darán cita en Zaragoza, del 10 al 12 de diciembre, para participar en unas jornadas sobre expolio arqueológico. Las jornadas llevan por título 'El retorno de los cascos. Expolio y tráfico ilícito de los bienes arqueológicos; redes, estrategias y procedimientos' y se organizan con motivo del regreso a Aragón de los cascos expoliados en Aranda de Moncayo. La pandemia ha retrasado la organización de la cita, ya que la presentación de las piezas en el Museo de Zaragoza se remonta a hace casi dos años, a diciembre de 2019.

El coloquio está estructurado en cuatro bloques o mesas redondas. La primera se centrará en las estrategias y procedimientos de las fuerzas y cuerpos de seguridad contra el expolio y el tráfico ilícito. La segunda abordará el camino que recorren los objetos expoliados desde que son hallados con un detector de metales a la vitrina del coleccionista. La tercera se ocupará de la normativa penal y administrativa contra el expolio arqueológico y la cuarta y última lleva por título 'Educación, comunicación y colaboración contra el expolio'.

Entre los participantes están Corrado Catesi (Interpol), Luigi Mancuso (Europol), Montserrat de Pedro (Brigada Patrimonio Histórico de la Policía Nacional), Juan José Águila (Patrimonio UCO Guardia Civil), Samuel Hardy (Universidad de Oslo), Ana Vico (galerista), Antonio Roma (fiscal de Patrimonio Histórico) o Michela de Bernardin (Center for Cultural Heritage Technology).

Los siete cascos hispano-calcídicos recuperados y que ahora se exponen en el Museo de Zaragoza proceden de una ciudad llamada Aratis, ubicada junto a la actual Aranda de Moncayo, que fue erigida en la Edad de Hierro, entre los años 700 y 400 antes de Cristo y destruida por roma entre los años 74 y 72 antes de Cristo, con motivo de las guerras sertorianas. Los cascos se forjaron en bronce en el siglo III antes de Cristo y fueron expoliados del yacimiento aragonés. La apertura del nuevo espacio dedicado a los cascos ha coincidido con una campaña de excavaciones en el yacimiento.

14 de octubre de 2020

Aranda de Moncayo ampliará el Centro de Interpretación de la Celtiberia y Aratikos

Las instalaciones están cerradas por obras de mejora y durante los trabajos se acondicionará una sala para acoger la exposición de los cascos recuperados.

Fachada del Centro de Interpretación. FOTO: Pilar López Rojo
El Ayuntamiento de Aranda de Moncayo (Zaragoza) tiene previsto iniciar en unas semanas varias actuaciones en el centro de interpretación de la antigua ciudad de Aratis (también conocida como Aratikos) y la Celtiberia que permitirán actualizar, modernizar y poner en valor este espacio museístico.

El paso del tiempo y la ausencia de intervenciones han ocasionado varias deficiencias sobre este espacio que se ubica en las antiguas escuelas de la localidad. Las instalaciones se inauguraron en enero de 2016 con el objetivo de difundir uno de los yacimientos celtíberos más importantes de la Península y convertirlo en un motor de desarrollo del municipio.

"Hay bastantes humedades y goteras que han provocado desconchones en algunas de las paredes, así como el levantamiento del suelo en algunas zonas", argumenta el alcalde de la localidad, Javier Jordán.

Las intervenciones se centrarán en reparaciones en la cubierta así como en la sustitución del suelo y de las puertas y ventanas. También se va a habilitar una nueva sala contigua al espacio existente de cara a poder albergar una exposición temporal con los cascos expoliados del yacimiento de Aratikos y que en este momento se encuentran depositados en el Museo Provincial de Zaragoza.

El alcalde de la localidad ya le mostró su interés al presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, de poder participar en algún tipo de cesión temporal durante la presentación oficial de estos siete cascos recuperados hace unos meses.

A juicio de Jordán sería un importante revulsivo para el turismo en la localidad y una oportunidad para que los vecinos puedan admirarlos en su pueblo. Por ello, desde el Consistorio ya se han iniciado las gestiones oportunas para que esta intención pueda ser una realidad, aunque por el momento las piezas siguen en el Museo Provincial y no están expuestas al público. La intención del Ejecutivo autonómico es organizar una muestra sobre la cultura de la celtibérica en Aragón en estas instalaciones de la capital aragonesa.

INVERSIÓN DE 20.000 EUROS
El centro de interpretación permanecerá cerrado mientras durante los trabajos que supondrán una inversión entorno a los 20.000 euros que financiará el consistorio.

Aratikos, en Aranda de Moncayo, es uno de los yacimientos celtíberos más importantes de la Península. De ahí salieron los cascos de bronce celtíberos recuperados recientemente tras su expolio, lo que llevó en 2006 al Ayuntamiento de Aranda a impulsar este centro de interpretación.

14 de enero de 2020

Hallan en Ateca nuevos restos arqueológicos relacionados con El Cid

Encuentran piezas de cerámica y muros del enigmático poblado zaragozano de Alcocer, descrito en el Cantar de Mío Cid
Restos de construcciones de lo que fue el poblado de Alcocer, conquistado por El Cid a los musulmanes, según el poema del Cantar . FOTO: DIPUTACIÓN DE ZARAGOZA.
Los arqueólogos han hallado en Ateca (Zaragoza) nuevos restos de enseres domésticos ligados a un antiguo poblado medieval descrito en el Cantar de Mío Cid. Se trata de fragmentos de piezas de cerámica como ollas y cazuelas, así como los vestigios de dos muros que no estaban documentados hasta la fecha.

Este yacimiento de Ateca, en el paraje de La Mora Encantada, se ha identificado con el desaparecido poblado de Alcocer, un enigmático enclave del que no hubo ni rastro durante siglos, solo su descripción en el Cantar de Mío Cid.

Hace treinta años, los investigadores concluyeron que todo apuntaba a que estaba en las inmediaciones de Ateca, y hace 15 años las excavaciones arqueológicas dieron con los restos de un antiguo poblado medieval que se ha identificado con el Alcocer descrito en el poema de El Cid.

ENCLAVE MUSULMÁN
Según el Cantar, Alcocer fue un enclave musulmán que las huestes de El Cid conquistaron a los musulmanes en estas tierras del estratégico valle del Jalón, eje natural de comunicación entre el Valle del Ebro y la Meseta.

Los enseres que se han encontrado ahora han sido datados en el siglo XI, de época taifal, cuando este territorio del valle del Jalón seguía bajo dominación musulmana.

Estos hallazgos han tenido lugar durante la última campaña de excavaciones que se ha realizado en el paraje de La Mora Encantada, que desde hace años es objeto de investigaciones arqueológicas. Según ha explicado el historiador Francisco Martínez, los restos que han aparecido refuerzan la idea de que este poblado era Alcocer, el enclave descrito en el Cantar de Mío Cid.

Estas últimas prospecciones se realizaron el pasado mes de noviembre, financiadas un año más por la Diputación de Zaragoza (DPZ). Los resultados de estos trabajos se dieron a conocer este lunes.

«Las excavaciones han permitido resolver una incógnita que duró décadas», destacó Francisco Martínez: «Alcocer existió, y está en Ateca», subrayó a partir de los hallazgos que se han producido durante los últimos años.

Este historiador afirmó que «la confirmación de que Alcocer está en el paraje de La Mora Encantada abre la puerta a la posibilidad de que El Campeador, una vez desterrado en el año 1081, siguiese la ruta del Jalón para llegar a Barcelona y buscar cobijo en la corte de los condes Ramón Berenguer II y Berenguer Ramón II».

ABANDONO EN EL SIGLO XI
Las excavaciones no solo han permitido identificar dónde estuvo Alcocer sino también el fin que tuvo este poblado. Los hallazgos «refuerzan la idea del abandono definitivo del asentamiento tras su destrucción y quema, a finales del siglo XI».
Quinta campaña de excavaciones

El yacimiento se encuentra a escasa distancia del casco urbano de Ateca, dentro de su término municipal. Ocupa una zona alta y abarrancada, característica de los emplazamientos hispanomusulmanes.

Esta es la quinta excavación arqueológica que se realiza en este enclave. La primera se llevó a cabo en 2004, promovida por el Ayuntamiento de Ateca. Las otras cuatro se han realizado en los años 2016, 2017, 2018 y 2019, bajo los auspicios de la Diputación de Zaragoza y en el marco del programa de actividades ligadas al Camino del Cid, ruta gestionada por un consorcio interprovincial del que forma parte la DPZ.

(Fuente: ABC

26 de junio de 2019

Enigma en la ciudad romana de Los Bañales (Zaragoza)

Los arqueólogos descubrieron unas extrañas marcas en el suelo de una habitación que abren las incógnitas sobre su posible utilidad
El extraño pavimento descubierto en el yacimiento romano de Los Bañales. FUNDACIÓN UNCASTILLO
Sorpresa en la antigua ciudad romana de Los Bañales. El arqueólogo Juan José Bienes estaba excavando la semana pasada una habitación en la zona norte de este yacimiento situado en Uncastillo (Zaragoza) cuando, al limpiar el suelo con ayuda de su compañero Pedro Ultra, empezaron a salir a la luz unas enigmáticas marcas. Tallado en la roca arenisca, el director técnico de las excavaciones descubrió un extraño zig zag que divide el pavimento de esta estancia, en eje con las dos columnas icónicas de Los Bañales que han sobrevivido milagrosamente erguidas hasta hoy.

«Lo primero que pensamos fue en algo de tipo ritual o religioso, un templo donde se sacrificaran grandes bovinos para tener que evacuar tanta sangre», pero ni el lugar ni el entorno casaban con esta hipótesis, según relata Bienes. Otra idea que consideraron al descubrir estas singulares estrías, más o menos profundas, es que podrían haber formado parte de un calendario para señalar las cosechas o de un reloj solar, en una zona a cielo abierto, en eje con ese gran edificio de las dos columnas (que en realidad eran cuatro), como los que hay en foros de algunas ciudades romanas del norte de África, como en Timgab.

«Pero ahora mismo cobra más fuerza pensar que probablemente son unas estrías que estuvieron muy vinculadas al uso que se dio a esa habitación», afirma Javier Andreu, profesor de Historia Antigua de la Universidad de Navarra y director del proyecto arqueológico de Los Bañales. Roma empleó esta técnica en lugares en los que se concentraba humedad, para achicar agua o verter líquidos al exterior. En la casa del acueducto de Tiermes (Soria) existe una estructura parecida que tiene que ver con la evacuación de agua y en las bóvedas de las salas de baños que estaban calefactadas se utilizó algo similar para evitar el goteo por condensación de humedad. «Eso permite pensar que fue una habitación en que se trabajó con líquidos y eso nos abre al escenario comercial», prosigue el director del proyecto arqueológico de Los Bañales.

De momento, no han encontrado ningún punto de desagüe para estos canales en zig zag que no siguen un dibujo claro, pero aún solo se ha excavado la zona norte y central de la habitación. El singular pavimento continúa hacia el sur, acercándose a las dos columnas que forman el hito geográfico de la zona. Una vez que se complete el estudio de esta estancia y de las habitaciones contiguas, los expertos podrán comprobar si, como sospechan, se encuentran ante una zona comercial de la ciudad. «Quizá ante lo que estamos, aunque es pronto para asegurarlo, es ante un "macellum", un gran mercado, ubicado mirando el territorio eminentemente agrícola que controlaba la ciudad, el del valle del río Riguel, en los términos actuales de Uncastillo y de Sádaba», avanza Andreu.

Los investigadores ubican esta habitación en la que creen que era última manzana al norte de este importante centro urbano entre el siglo I a.C. y los comienzos del siglo III. La entrada a la urbe romana, que se extendía por más de 20 hectáreas, se localizaba justo en el otro extremo, a unos tres kilómetros al sur, en el acceso a la vía que conectaba Caesaragusta (Zaragoza) con Pompelo (Pamplona). «En esta zona norte parece que Roma quiso establecer un sistema de urbanización muy vitruviano, con calles este-oeste (decumanos) y norte-sur (cardines) que se van cortando, un modelo de urbanismo que no fue una adaptación del que ya existía, sino casi de tipo colonial», apunta el director de Los Bañales. En esa zona norte, más apropiada para la conservación y producción de alimentos, es donde probablemente se situó el barrio comercial.

Los expertos creen que el singular pavimento formó parte de un gran complejo que probablemente se erigió en la primera mitad del siglo I d.C. «A partir de la segunda mitad del siglo II y hasta el abandono de la ciudad en la primera mitad del III todos esos espacios fueron reocupados, cambiaron de funciones, así que es muy difícil encontrar materiales contemporáneos a las marcas. Ahí vamos a tener un reto», afirma Andreu.

Durante las excavaciones que han seguido al descubrimiento del pavimento se han hallado algunos objetos, como una cucharilla de bronce pegada al suelo de roca, pero hasta el momento los arqueólogos no han dado con ninguna cerámica ni con restos de fauna que corroboren esta hipótesis. En las próximas semanas de campaña, que finalizará el 28 de julio, esperan encontrar más elementos de este complejo puzle.

Una vez que hayan excavado por completo la habitación, el estudio de las pendientes de los canales servirá para comprobar si tuvieron o no esa función de drenaje que ahora contemplan. Si los datos no concuerdan, tendrán que replantearse de nuevo para qué tallaron los romanos esas enigmáticas estrías. «Habría que buscar otras alternativas», admite Andreu antes de explicar que en otros lugares se han encontrado rozas de este tipo constructivas, realizadas para cimentar o calzar algún edificio. En este caso, sin embargo, las hendiduras «son muy estrechas, no tienen la anchura suficiente como para recibir muros de mampostería y tampoco tiene mucho sentido en esa habitación que sí ha conservado los muros laterales en cuadratum muy bien delimitados, que justo se hayan robado los muros interiores que estuvieran calzados sobre esas rozas».

Si no sirvieron de drenaje, «tendríamos que volver a la hipótesis inicial de que fuera una zona a cielo abierto y que tuviera algo que ver con algún calendario o reloj solar», reconoce.

De lo que no hay duda, según Andreu, es que con sus calles y pasos de peatones, este ya es uno de los barrios más impactantes desde el punto urbanístico del norte peninsular. «Los Bañales ofrece el barrio más vitruviano de los que tenemos en el norte de España».

5 de febrero de 2018

Descubren un nuevo conjunto de pinturas rupestres en el Campo de Belchite (Zaragoza)

Las pinturas encontradas podrían pertenecer a la época del Neolítico (5.500-3.000 años antes de Cristo) o ser de finales del Paleolítico o Epipaleolítico (10.000-7.000 años a. C.). Se pueden distinguir los dibujos de algunos ciervos, pero la conservación de los mismos no es muy buena ya que en la zona antiguamente había una explotación minera que hoy está abandonada.
El empresario Josep Andreu, que tiene un negocio cerca del abrigo rupestre. A la dcha., el detalle de una cornamenta de animal.FOTO: Guillermo Mestre.
El Gobierno de Aragón está estudiando el valor de un conjunto de pinturas rupestres que fue descubierto hace un mes en un paraje de la comarca del Campo de Belchite. Pocos días después del hallazgo, la dirección general de Cultura y Patrimonio envió a dos técnicos a la zona para comprobar la autenticidad del mismo y determinar su identidad.

Los funcionarios confirmaron que se trata de pinturas rupestres de estilo levantino y ya se está realizando la campaña de prospección y documentación de las mismas para valorar su interés, diagnosticar su estado de conservación y proponer, en su caso, las medidas pertinentes de protección.

El abrigo fue hallado a principios de año de forma accidental, durante una excursión para buscar dolomías.El descubridor fue un arqueólogo que llegó hasta esta zona de la provincia de Zaragoza invitado por Josep Andreu, propietario de una sociedad que explota una cantera de carbonato cálcico en la comarca. Andreu y el arqueólogo, que ha centrado su trabajo en este tipo de vestigios, son amigos desde hace años, cuando se conocieron en Monblanc (Tarragona), donde casualmente existe un Centro de Interpretación de Pinturas Rupestres.

Fue este especialista quien puso en conocimiento del Gobierno de Aragón el hallazgo del conjunto y la dirección general de Cultura, una vez que confirmó la autenticidad, procedió a abrir un expediente administrativo siguiendo el procedimiento habitual. En estos momentos se está realizando un estudio a cargo del Servicio de Prevención, Protección e Investigación para adoptar las medidas más adecuadas en cuanto a la protección legal y física del conjunto.

El expediente abierto supone convertir el lugar en un Bien de Interés Cultural (BIC) y será necesario valorar la delimitación del abrigo con un vallado o verjas que protejan las pinturas.

VARIOS ABRIGOS
Actualmente, un equipo de técnicos del Ejecutivo está investigando si en la zona hay más conjuntos con pinturas rupestres. El equipo ya ha aportado un primer informe a Patrimonio, en el que se precisa que existe un abrigo con pinturas rupestres (el descubierto en enero) y varios más en los alrededores con restos indeterminados. Estos hallazgos pueden convertir a esta zona de la comarca del Campo de Belchite en un polo de atracción turística para los interesados en el arte rupestre, ya que se trata de un lugar bastante cercano a la capital aragonesa.

En principio, las pinturas encontradas podrían pertenecer a la época del Neolítico (5.500-3.000 años antes de Cristo) o ser de finales del Paleolítico o Epipaleolítico (10.000-7.000 años a. C.). Se pueden distinguir los dibujos de algunos ciervos, pero la conservación de los mismos no es muy buena ya que en la zona antiguamente había una explotación minera que hoy está abandonada.

El Gobierno de Aragón prefiere que el lugar en el que se encuentran las pinturas, de momento, permanezca oculto por motivos de prevención y de protección. "El descubrimiento exige que no se publicite la ubicación exacta para permitir los primeros trabajos y evitar que se produzcan daños", apuntaron fuentes oficiales.

PROYECTO EN OTROS PUNTOS
Esta campaña de prospección e investigación se incluye dentro del proyecto que la dirección general de Cultura y Patrimonio realiza desde 2015 para la monitorización del arte rupestre de Aragón y que condujo el año pasado al descubrimiento, protección y puesta en valor de varios conjuntos en la localidad el Tormón, en el Parque Cultural de Albarracín; o de Alcañiz, en el Bajo Aragón. Asimismo, la DGA pretende coordinar otras actuaciones encaminadas al diagnóstico sobre la conservación del arte rupestre aragonés.

4 de enero de 2018

La villa romana de Azuara abrirá al público con un proyecto de reconstrucción volumétrica

El anteproyecto de la villa romana de La Malena, en Azuara (Zaragoza) propone un cerramiento del recinto con cierres laterales, además de cubierta. A la propuesta de cubrimiento se suma la inclusión de recorridos para la visita del yacimiento, salvaguardando los espacios donde se ubica suelo de mosaico y creando plataformas de aproximación.
La actuación permitirá la visita a la villa romana. FOTO: GOBIERNO DE ARAGÓN
El Gobierno de Aragón comenzará en 2018 la reconstrucción volumétrica del yacimiento de la Malena en Azuara (Zaragoza), una solución para conservar y proteger este bien patrimonial que permitirá su apertura al público para facilitar la comprensión cultural del fenómeno de las villas romanas en el territorio. El anteproyecto de actuaciones para la protección de la villa ha sido aprobado en Comisión de Patrimonio de Zaragoza.

Durante el 2017, se ha realizado el proyecto de recuperación de una de las estancias de la Villa Romana, que se ha apoyado con labores de mantenimiento y limpieza en el yacimiento en colaboración con el Ayuntamiento de Azuara y con los vecinos y vecinas de la localidad.

Ahora, con este proyecto global, que contempla la ejecución temporal por fases, se quiere conseguir la conservación de un bien patrimonial básico y de los numerosos e importantes mosaicos, pavimentos y restos de pintura mural que lleva asociados.

Se trata de notables elementos que, junto a los restos arqueológicos murarios y de antiguas infraestructuras de la villa, se desarrollaron en un contexto arquitectónico, en gran parte desaparecido, y que se pretende recuperar volumétricamente.

Esta tarea de conservación debe completarse con delicadas labores de restauración de los mosaicos de las distintas dependencias y con la instalación de un recorrido para su observación y entendimiento, con las medidas de seguridad precisas para su protección.

El programa de necesidades se ha centrado en plantear un sistema de cubierta y cerramiento lateral que garantice la protección del yacimiento excavado, permitiendo la restauración de los restos arqueológicos “in situ”.

Se trata de un planteamiento innovador, una solución singular que pocas veces se ha llevado a cabo, ya que en los ejemplos realizados la protección se suele limitar a la cubierta del yacimiento sin cerramientos laterales, confiando con ello la seguridad del yacimiento al recinto externo.

El desarrollo de las excavaciones a lo largo del periodo transcurrido desde el descubrimiento de la villa ha ido arrojando informaciones complementarias sobre sus características arquitectónicas, sobre todo del núcleo central. Con lo recopilado, se ha conseguido información básica sobre los restos murarios que ha permitido realizar un planteamiento global que podrá adaptarse a las novedades que se produzcan en los futuros trabajos.

A través de la información extraída, se ha establecido la propuesta de cubrimiento y protección de la villa, que incluye recorridos para su futura visita, salvaguardando los espacios donde se ubica suelo de mosaico y creando plataformas de aproximación desde las estancias que carecen del mismo, una instalación que permite la observación de prácticamente toda la villa.

El Departamento de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón pretende con este proyecto facilitar la comprensión cultural del fenómeno que las villas romanas supusieron en la colonización del territorio durante varios siglos de la historia de Aragón. Para ello, adecuará un espacio de servicios para acoger a los y las visitantes y que dará acceso al yacimiento, así como un aparcamiento de vehículos en la zona sureste de la villa.

Además, se prevé que la zona más próxima al río Cámaras pueda ser utilizada como área de recreo externa al recinto arqueológico para los y las visitantes de la villa, debido al atractivo natural, pudiendo dotarse de áreas de picnic, etcétera.

BIEN DE INTERÉS CULTURAL
El yacimiento de La Malena, declarado Bien de Interés Cultural bajo la categoría de Zona de Interés Arqueológico, fue descubierto en 1988 y hasta el momento han sido varios los trabajos de carácter científico, técnico y administrativo que se han desarrollado en él. Los resultados arqueológicos determinaron la existencia de una Villa Romana del siglo IV que presentaba en la mayoría de sus estancias mosaicos y mosaicos parietales, pavimentos de tierra y pavimentos de mortero.

Desde el inicio se determinó la importancia del yacimiento por sus mosaicos de teselas y, en concreto, por el mosaico de Las Bodas de Cadmio y Harmonía, considerado una obra cumbre de la musivaria romana en Hispania.

(Fuente: Arainfo)

5 de septiembre de 2017

Los arqueólogos regresan al Cerro del Calvario de Tabuenca (Zaragoza)

Tras los buenos resultados de la excavación arqueológica de 2016, se desarrolla en Tabuenca un curso de arqueología práctica reconocido con 2 créditos de formación por la Universidad de Zaragoza.
El poblado está vinculado a la minería del hierro entre los siglos II aC y II dC.
Tabuenca vuelve a convertirse en el lugar elegido para continuar la investigación arqueológica sobre los paisajes mineros en la Antigüedad en el Sistema Ibérico desarrollada por el Grupo de Investigación URBS-IUCA de la Universidad de Zaragoza. Las actuaciones arqueológicas de 2016 en Tabuenca permitieron evaluar el enorme potencial científico que ofrece esta localidad en la que se sitúa el yacimiento arqueológico “Cerro del Calvario”.

El poblado está vinculado a la minería de los óxidos de hierro de la Sierra del Moncayo y a su transformación en metal en decenas de escoriales asociados a la presencia celtibérica y romana en este territorio. La actividad minero-metalúrgica documentada en la intervención de 2016 evidencia la producción de cientos de toneladas de hierro entre los siglos II a.C. y II d.C. en el entorno del asentamiento minero del Cerro del Calvario. Junto a esta actividad minero-metalúrgica, las excavaciones de 2016 en el Cerro del Calvario permitieron conocer el urbanismo del poblado, la cultura material y actividades relacionadas con la agricultura y la ganadería.

EQUIPO TÉCNICO
Los trabajos arqueológicos estarán dirigidos nuevamente por Óscar Bonilla Santander de la Universidad de Zaragoza y Begoña Serrano Arnáez de la Universidad de Granada. El equipo técnico estará formado por los arqueólogos Ángel Santos Horneros, Alicia María Izquierdo, Carlos Valladares Lafuente y la restauradora Miriam Pérez Aranda. En el curso participarán 14 alumnos de los grados de Historia y Arqueología de la Universidad de Zaragoza, la Universidad de Granada, la Universidad Complutense de Madrid, la Universidad Autónoma de Madrid, la Universidad de Jaén, la Universidad de Alicante y la Universitè Sorbonne Nouvelle de París en Francia.

Durante las tres semanas de duración del curso las actuaciones arqueológicas se centran en prospectar de forma intensiva el entorno del Cerro del Calvario, las minas y los lugares de transformación del mineral en metal. Así mismo se continúa con la excavación arqueológica de los sectores 1 y 2 excavados parcialmente en la campaña del año anterior. En el curso de arqueología reconocido con 2 créditos ECTS por la Universidad de Zaragoza se están realizando prácticas de excavación, prospección y conservación preventiva de estructuras y materiales arqueológicos, talleres de topografía, limpieza, siglado, inventariado, clasificación, dibujo, digitalización y fotogrametría de los materiales y las estructuras arqueológicas documentadas.

PUERTAS ABIERTAS
Las actividades de investigación se combinan con una decidida apuesta por la difusión y la divulgación científica mediante una política de “puertas abiertas” a los trabajos arqueológicos en el Cerro del Calvario y con una visita guiada a la excavación arqueológica. El sábado 26 de agosto a partir de las 17:30 se realizarán en el pabellón municipal de Tabuenca talleres infantiles y conferencias para todos los públicos centradas en la temática del “juego y los espectáculos en la antigüedad”, totalmente gratuitas y abiertas para todos los públicos.

El proyecto está organizado y financiado por el Ayuntamiento de Tabuenca. Además cuenta con la colaboración del Grupo de Investigación URBS-IUCA de la Universidad de Zaragoza, el Grupo de Investigación ISTVRGI de la Universidad de Granada y la Asociación Cultural Villardajos.

Los avances de los trabajos arqueológicos se pueden seguir diariamente en la página de Facebook “Excavación arqueológica Cerro del Calvario de Tabuenca” en la que se publican las novedades del proyecto de investigación: https://www.facebook.com/cerrodelcalvario y en Instagram en el perfil “@cerrodelcalvario”.

4 de agosto de 2017

Documentan una necrópolis medieval "única" de los siglos X y XI, en Lobera de Onsella (Zaragoza)

Hasta el momento, se han excavado 17 enterramientos, que corresponden a hombres, mujeres y a dos niños, todos ellos sin ajuar de ningún tipo. Los análisis realizados en Estados Unidos a las pruebas tomadas en los enterramientos ofrecen una cronología de entre los años 943 y 1024, periodo anterior a la formación del Reino de Aragón.
Las excavaciones arqueológicas realizadas en la localidad zaragozana de Lobera de Onsella han sacado a la luz una necrópolis medieval única en su género en toda España.

Hasta el momento, se han excavado 17 enterramientos, que corresponden a hombres, mujeres y a dos niños, todos ellos sin ajuar de ningún tipo. Los análisis realizados en Estados Unidos a las pruebas tomadas en los enterramientos ofrecen una cronología de entre los años 943 y 1024, periodo anterior a la formación del Reino de Aragón.

Así lo han explicado en una rueda de prensa el diputado provincial delegado de Turismo de la Diputación de Zaragoza, Bizén Fuster, el alcalde de Lobera de Onsella, Chabier Mayayo, y José Ignacio Lorenzo, arqueólogo y antropólogo, decano del Colegio Oficial de Doctores y Licenciados en Filosofía y Letras de Aragón y director de la investigación arqueológica.

La necrópolis se descubrió hace tres años, de forma accidental, durante las faenas agrícolas de un vecino en el llamado cerro de San Miguel. La investigación arqueológica ha puesto de manifiesto la importancia del enclave, puesto que en él ha aparecido un tipo de enterramiento hasta ahora desconocido en la España medieval, en que los cuerpos se depositaban en habitáculos construidos con piedras amontonadas.

PUERTAS ABIERTAS
El alcalde del municipio, Chabier Mayayo, ha explicado que el próximo sábado se mostrarán las excavaciones y los restos encontrados durante una jornada de puertas abiertas.

Comenzará a las 12.00 horas con una conferencia a cargo del arqueólogo José Ignacio Lorenzo, a la que seguirá la proyección de un vídeo sobre el yacimiento y la inauguración de una exposición con fotografías de este espacio. A las 19.00 horas se llevará a cabo una visita guiada a la necrópolis.

Lorenzo ha resaltado la "importancia" de la "colaboración inusual" que se ha dado entre las tres instituciones implicadas , el Ayuntamiento, el Gobierno aragonés y Diputación de Zaragoza, lo que ha permitido realizar el estudio de dos muestras de dos tumbas en Estados Unidos.

El arqueólogo ha añadido que "no se trata de una tumba medieval más", y ha destacado las particularidades de estos enterramientos. En primer lugar, la datación de las tumbas, que ha situado entre los años 943 y 1024, "muy antiguas, que nos sitúa en los orígenes del Reino de Aragón" en el caso del año 943, y en el antiguo reino de la Bal d'Onsella. Ha añadido que hasta ahora los enterramientos más antiguos procedían del siglo XI.

TUMBAS TRAPEZOIDALES
Asimismo, ha resaltado su tipología "diferente", que se define por primera vez, dado que son tumbas "más o menos trapezoidales, pero con un pequeño estrechamiento en la parte superior y con la cabeza no marcada", además de rodeadas de losas de piedra que delimitan los laterales.

Hasta el momento se han excavado 17 tumbas "y todas con esta tipología. Se trataría de una población que se asentó en el cerro de San Miguel y, por los siete individuos analizados, eran personas "del valle del Ebro", no muy altos, con 1,65 o 1,70 metros de altura máxima. Se observan físicamente "castigados" en sus extremidades y con signos de "mala alimentación, con gingivitis generalizada en la dentadura", según el experto.

RELACIONES FAMILIARES
De las 17 tumbas excavadas, dos pertenecen a niños de 9 y 11 años de edad, tres a mujeres de más de 30 años, cuando lo habitual en la época era que fallecieran en el parto, y el resto a hombres de distintas edades. En todos ellos "se aprecian que tienen relaciones familiares".

Junto a los huesos no ha aparecido ningún otro material arqueológico ni de cerámica. Era común en la época que los cuerpos no se enterraran junto a objetos por orden de la Iglesia y solo se salvaban de esta norma los "privilegiados", como los Reyes de Aragón.

Lorenzo ha manifestado que este año quieren estudiar la extensión total de la necrópolis y encontrar otros restos humanos. Por su parte, el alcalde ha indicado que se desconoce la extensión exacta del yacimiento, pero ha estimado que "supera al núcleo actual de Lobera de Onsella", dado que ocupa el actual cementerio y parte de los campos anexos.

14 de julio de 2017

Aparece un tramo de la muralla romana de Zaragoza en un sótano particular

Se trata de una parte del muro norte que se corresponde al arranque sur de la torre. Mide 4.75 metros lineales de lienzo y alcanza 2,3 metros de altura, que se distribuye en cuatro hiladas. Forma parte del torreón exterior de los siglos III-IV y se encuentra en buen estado de conservación.
Los restos han permanecido sin documentar pese a estar a la vista. FOTO: FABIÁN SIMÓN / ABC
El Ayuntamiento de Zaragoza presentó el jueves los restos de un muro de sillares descubierto en los sótanos del inmueble número 147 del Coso, esquina con la plaza de la Magdalena y cercano a la derribada puerta o arco de Valencia. Forma parte del Torreón Exterior, datado en la segunda mitad del siglo III o comienzos del IV. Sin embargo, el hallazgo más novedoso corresponde al número 151, un sótano que en estos momentos es un local comercial de titularidad particular utilizado como zona de almacén.

Su extensión es prácticamente la de la totalidad de la planta rectangular: 62 metros cuadrados. Se trata de una gran parte del muro norte, y corresponde al arranque sur de la torre: 4.75 metros lineales de lienzo. Cubre 2,3 metros de altura, que se distribuye en cuatro hiladas. Entre las hiladas inferiores de las torres se perciben también tres escalonamientos. Hay varios sillares que muestran abombamiento en buena parte de la cara expuesta.

SIN CATALOGAR
En el sótano del antiguo inmueble del número 153 se ha confirmado la existencia de la parte interior de este hallazgo, de la que se tenía constancia por parte de algunos expertos, pero que estaba sin catalogar ni documentar. Ahora se sabe que ocupa una superficie de construcción de unos 61 metros cuadrados. El estado de conservación de la parte interior de este torreón es bueno también pero ahora mismo necesitará una importante labor de limpieza porque parte está cubierto de algún tabique y estructura accesoria ya que ocupa el almacén de un bar.

En el contexto del Plan Director de Vestigios Romanos de Caesaraugusta que los responsables de Arqueología querían hacer, el Ayuntamiento dio luz verde a un proyecto de investigación para intentar encontrar más vestigios de las murallas romanas de Caesaraugusta. Y en este contexto, fue cuando se encontró la posibilidad de que en estos sótanos tenía que haber algo.

ACCESO INDEPENDIENTE
Ahora, el objetivo es lograr ponerlo a disposición del público para que sea visitable. "Habría que encontrar el modo de lograr un acceso independiente del bar y de la tienda para unir los sótanos por debajo", según ha puesto de manifiesto el consejero municipal de Cultura, Fernando Rivarés, de manera que pueda ser visitado por zaragozanos y turistas porque "es un valor patrimonial muy importante porque es lo que era el límite de la ciudad".

El alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, ha visitado este tramo, que suponen un descubrimiento "bien interesante" para "ir cerrando el círculo del conocimiento de la ciudad romana a través de la Muralla". También permite comprobar cómo la Muralla se iba conformando a lo largo de una serie de torreones con una gran puerta como esta.

TORRE SUR
Paco Escudero, experto en la materia, ha explicado que hasta la fecha sólo se contaba con una parte de la puerta y ahora "se ha encontrado una parte de la Torre Sur". Allí se ha encontrado la parte inferior de la torre, pero quizá si se limpiara se encontraría incluso más". "Hasta ahora hay seis alturas de sillares muy bien conservados y tenemos una torre especial porque es de puerta", ha agregado Escudero.

La Zaragoza romana tenía cuatro puertas y hasta el momento se conoce "algo" de dos de ellas, ha dicho Escudero. Sin embargo, esta es la de más altura porque "hasta hace poco lo que teníamos de la puerta de Valencia era una fotografía de 1867, pero no había más, pero esto es estrictamente la jamba de la puerta". Históricamente se sabe poco de este torreón, ha reconocido, pero también ha dejado claro que a partir de ahora se seguirá investigando. Se trata de unos sótanos particulares, por lo que todo lo que se haga desde este momento "siempre sería mediante convenio con ellos".

MUY BUEN ESTADO 
Por su parte, el gerente de Urbanismo, Miguel Ángel Abadía, ha apuntado que, en una primera inspección realizada, el torreón se encuentra en un estado de seguridad "muy bueno", por lo que no hay que hacer ninguna actuación de apuntalamiento. Desde arqueología quieren hacer acciones para averiguar cuál es el resto y o que puede haber escondido y, en función de esos requerimientos, se tendrá que iniciar un proceso de aseguramiento de edificación para poder avanzar en su estudio.

En cuanto al futuro de la edificación y la muralla, también se actuará en función de lo que digan los servicios de Arqueología. Desde el punto de vista jurídico, a través del Plan General, "articularemos lo necesario para recoger este elemento de nueva aparición y darle la protección jurídica adecuada", ha indicado Abadía.

Begoña Bolea es la propietaria de la tienda en cuyo sótano se ha encontrado la parte más grande. Se ha mostrado "contenta y sorprendida" de todo el interés del Ayuntamiento. "Cuando compré el establecimiento en 2001 ya estaba visible el torreón, pero no sabía el valor ni el interés que tiene", ha explicado.

10 de julio de 2017

Descubren un poblamiento de la Edad del Hierro bajo el castillo medieval de Los Fayos (Zaragoza)

Las excavaciones arqueológicas en el enclave han permitido documentar un asentamiento de hace 2.600 años y estudiar las fortificaciones medievales de época cristiana.
Bajo las estructuras medievales han aparecido evidencias de población en la I Edad del Hierro. 
Las excavaciones realizadas durante los meses de junio y julio han permitido localizar estructuras vinculadas a las fortificaciones medievales y elementos militares como puntas de flecha de arco y ballesta que se ponen en relación con los continuos conflictos bélicos de los reinos de Aragón, Navarra y Castilla en la Edad Media, ya que el Castillo de Los Fayos por su importancia estratégica cambió de manos en numerosas ocasiones en este período.

ESTRUCTURAS MEDIEVALES Y DE LA EDAD DEL HIERRO
Bajo las estructuras medievales se han localizado niveles correspondientes a la I Edad del Hierro con objetos cerámicos elaborados a mano de superficies pulidas destinados al servicio de mesa y grandes vasijas de almacenamiento de alimentos. Estos elementos guardan una gran similitud con los localizados en la mina de hierro de “Plana del Cerro”, la más antigua documentada en la Península Ibérica, excavada en la primera fase de este proyecto.


El enclave se localiza en una estratégica posición de control y dominio visual del camino natural que une el Valle del Ebro con la Meseta Castellana a las faldas del Moncayo. El conjunto histórico patrimonial del Castillo de Los Fayos lo conforman un sistema de fortificaciones de época medieval de los siglos XII-XIV compuestas por una torre cuadrangular, una torre circular de 9 metros de diámetro, una cueva fortificada de tres pisos con entramado de madera protegida por una muralla de piedra y tapial y varios fosos concéntricos de cientos de metros de longitud convirtiéndola en una de las fortificaciones más impresionantes de la región.

PROYECTO DE INVESTIGACIÓN
Las excavaciones se han centrado en la zona más alta de la fortificación en un farallón rocoso de más de 80 metros de altura sobre el río Queiles en su confluencia con el río Val. Los trabajos arqueológicos de campo han consistido en primer lugar en una prospección intensiva para la que se ha utilizado un GPS de precisión y una aeronave no tripulada tipo dron. También se han realizado excavaciones en dos sectores en las inmediaciones de la torre circular que han permitido localizar aproximadamente 2000 elementos arqueológicos, entre los que destacan un notable conjunto de piezas cerámicas de la I Edad del Hierro de unos 2600 años de antigüedad. El registro se ha llevado a cabo combinando las técnicas tradicionales de la disciplina arqueológica con el uso de fotogrametría y modelado 3D.

EQUIPO DE TRABAJO
El proyecto dirigido por Óscar Bonilla Santander de la Universidad de Zaragoza y Begoña Serrano Arnáez de la Universidad de Granada ha sido financiado por el Ayuntamiento de Los Fayos. El equipo técnico lo componen los arqueólogos Carlos Valladares Lafuente, Alicia María Izquierdo y Ángel Santos Horneros, la restauradora Miriam Pérez Aranda y estudiantes universitarios de los Grados de Historia y Arqueología.

6 de junio de 2017

Comienzan las excavaciones en el yacimiento celtibérico ‘Plana del Cerro’, en Los Fayos (Zaragoza)

Ayer comenzaron las excavaciones arqueológicas en el yacimiento 'Plana del cerro’ que se prolongarán hasta el próximo 30 de junio. Se trata de la primera intervención que se realiza en el poblado celtibérico. 
La campaña estudiará en el yacimiento las actividades mineras en la II Edad del Hierro.
El asentamiento arqueológico denominado Plana del Cerro es un poblado Celtibérico de la II Edad del Hierro situado en un pequeño cerro junto al río Queiles. Hasta el momento no se habían realizado excavaciones arqueológicas y únicamente se conocía por los hallazgos superficiales documentados en prospección arqueológica compuestos por cerámica a torno celtibérica, cerámica a mano decorada, restos de escorias de hierro y sílex.

El objetivo de esta excavación es obtener un conocimiento en profundidad del asentamiento y del paisaje del valle del Queiles en la II Edad del Hierro, así como las actividades mineras y metalúrgicas desarrolladas en el poblado.

DIVULGACIÓN ARQUEOLÓGICA
Durante el mes de junio se desarrollarán diversas actuaciones arqueológicas y de difusión dentro del ‘Proyecto de concienciación patrimonial e integración social: I curso práctico de arqueología de Los Fayos’. El proyecto está dirigido por Óscar Bonilla Santander de la Universidad de Zaragoza y Begoña Serrano Arnáez de la Universidad de Granada, y participan profesionales y alumnado de los grados de Historia y Arqueología.

Durante todo el mes de junio se complementarán los trabajos arqueológicos de excavación y prospección con actividades gratuitas los domingos del propio mes compuestas por talleres infantiles/juveniles y charlas para todos los públicos acerca de la Prehistoria, el mundo celtibérico y época romana.

El proyecto ha sido organizado por el Ayuntamiento de Los Fayos y la Asociación de Investigadores del Moncayo, y cuenta con la colaboración del Grupo de Investigación URBS-IUCA de la Universidad de Zaragoza, Grupo de Investigación ISTVRGI de la Universidad de Granada, la Fundación Tarazona Monumental y el Ayuntamiento de Tarazona. Toda la información actualizada se podrá seguir diariamente en la página de Facebook: ‘Asociación de Investigadores del Moncayo’ y en ‘Instagram: @investigadoresmoncayo’.


La intervención se enmarca en el ‘Plan de subvenciones en materia de cultura, patrimonio histórico, artístico y arqueológico del Ayuntamiento de Los Fayos para el año 2017

15 de mayo de 2017

Hallado en Rodén un taller andalusí de piezas de alabastro del siglo XI

El obrador descubierto en Fuentes de Ebro (Zaragoza) solo tiene parangón con otro similar descubierto en el puerto iraní de Siraf. Han aparecido más de mil restos de alabastro que permiten recomponer la cadena de producción del siglo IX.
Jornada de trabajo con los participantes en la excavación del taller de alabastro de Rodén. FOTO: S.E.
A pesar de que la zona situada entre Fuentes de Ebro y Albalate del Arzobispo concentra la mayor producción mundial de alabastro, no se conocía hasta ahora la existencia de ningún taller en la zona donde se hubiesen elaborado piezas con este material. De ahí que el hallazgo de una escombrera en Rodén (Fuentes de Ebro) con restos evidentes de pertenecer a un obrador donde se fabricaron cuencos y vasos de alabastro supuso ya una interesante noticia. La sorpresa mayúscula llegó con la datación de las piezas encontradas, ya que su cronología se remonta al siglo XI, en pleno esplendor andalusí, y no tiene parangón en Europa y apenas referentes a nivel mundial, pues solo en el puerto iraní de Siraf se conoce una producción similar.

«Desde la Asociación Torre Rodén nos avisaron de que habían encontrado una escombrera con piezas de alabastro. En la zona no hay ningún taller documentado de ninguna época, lo que ya era importante pues suponía que en algún momento se había trabajado allí este material. La intención era saber qué tiempo tenían esos restos tan bien conservados, pensando que sería un taller relativamente moderno, de entre 100 ó 200 años», cuenta el ceramista y arqueólogo Javier Fanlo, que ha dirigido el proyecto de la excavación, en la que también ha colaborado el arqueólogo Jesús Picazo.

TODA LA CADENA DE PRODUCCIÓN

Lo que tras un complicado y metódico trabajo salió a la luz fue una colección de restos de alabastro --más de mil--, todos ellos desechos de la producción, cuyo abanico es tan amplio «que puede reproducirse toda la cadena de fabricación de principio a fin», cuenta Fanlo. Así, en los restos se encuentran desde los bolos o buñuelos, que es la piedra básica sin trabajar, a preformas --los bolos acondicionados ya mediante una primera talla--, piezas a mitad de hacer, y otras ya terminadas pero que se rompieron y fueron desechadas «que son las que parecen ser el producto fundamental del taller, cuencos hemiesféricos con bordes estriados y vasos lisos de paredes delgadas», aunque también aparecen, en menor medida, formas de alguna pieza especial «y todo de una gran calidad», recalca el arqueólogo.

Dentro de las piezas halladas cabe destacar unos restos en forma cónica, con un agujero central, y otros en forma de discos planos, que hablan del procedimiento de fabricación: «Son desechos del torneado, y conforman las piezas mayoritarias del yacimiento. Los conos son la parte central por la que se sujetaba la piedra al torno hasta que está terminada y luego ese cono que queda en el centro se quita con un golpe, mientras que para separar el cuenco se corta por la base y quedan los discos planos que hemos encontrado».

Un procedimiento de fabricación que emplea un torno con un eje horizontal y movido a pedal (como los que se utilizan aún para hacer cuencos de madera) en el que aprovechando el giro de la pieza, esta se va desgastando, vaciando por dentro y dándole forma por fuera con un cincel o una herramienta similar. «Una técnica innovadora para la época», apunta Fanlo, quien explica que tras comprobar la cronología de los restos mediante la técnica del Carbono 14 –que las sitúa en la primera mitad del siglo XI– surgió otro «problema», como era el no tener referencias con las que comparar las piezas. «Nos pusimos en contacto con numerosos museos europeos y profesionales de la arqueología y no fue fácil; al final encontramos formas similares en el Brithis Museum procedentes de Siraf, un importante puerto situado en Irán, en el Golfo Pérsico, cuyo auge tuvo lugar entre 850 y 1050 d.C.»

En este destacado centro comercial por el que pasaban los productos orientales hacia la Europa de entonces se ha documentado la manufactura de vasos de anhidrita, roca de yeso similar al alabastro, con una técnica idéntica a la del taller de Rodén, basada en la utilización de un torno. «Los restos de los productos fabricados allí son similares, por lo que, hasta la fecha, las manufacturas de Siraf son el único referente que hemos encontrado para la produccion de Roden», cuentan Fanlo y Picazo en su informe. «Se conoce la fabricación de vasos de piedra en Egipto y las islas mediterráneas, pero no torneadas, una técnica que solo encontramos en Rodén y en Siraf».

Los arqueólogos se encontraron así con que en el Valle del Ebro se dieron las condiciones precisas para una producción de vasos de piedra de clara referencia oriental –el comercio con oriente está documentado en la Taifa de Zaragoza con piezas incluso llegadas de China en la Aljafería--, piezas sofisticadas «que eran objetos de lujo, para quienes podían pagarlos; no era una producción popular para las casas –matiza Fanlo–, eran piezas destinadas a los palacios, a las élites de las taifas, y que posiblemente, con el flujo comercial que había con oriente, serían fabricadas por artesanos llegados de esas latitudes aprovechando la riqueza de alabastro de la zona»

De hecho, las únicas piezas similares a las ahora encontradas fueron halladas en el castillo de Albarracín. Más allá de eso y algún resto que salió en las excavaciones de la plaza de La Seo de Zaragoza –«una pieza discoidal que se clasificó como tapadera y que ahora se ve que es idéntica a los discos hallados en Rodén»–, apenas se encuentran objetos de alabastro del siglo XI tallados con torno, «ni en el Louvre ni en ningún sitio de Europa, solo las piezas de Siraf en el British Museum y las de Rodén», concluye Fanlo.