google.com, pub-4869754641634191, DIRECT, f08c47fec0942fa0 La Bitácora de Jenri: Almoina
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22 de septiembre de 2014

Descubren el primer mausoleo cristiano con mesa de ofrendas en Baelo Claudia, en Tarifa (Cádiz)

El espectacular estado de conservación de la necrópolis oriental de esta ciudad hispanorromana, en la que se han exhumado siete nuevos sepulcros, ofrece nuevos e importantes datos sobre el ritual funerario. El mausoleo cristiano alberga una inhumación de un personaje relevante de la comunidad que se puede fechar entre el siglo V y VI d.C.
Excavaciones en la ciudad hispano-romana de Baelo Claudia. FOTOS: Fernando Prados Martínez.
El Área de Arqueología de la Universidad de Alicante, bajo la dirección del profesor Fernando Prados, está desarrollando en estos días la 3ª Fase del Proyecto General de Investigación de la Junta de Andalucía “Muerte y Ritual Funerario en Baelo Claudia (Tarifa, Cádiz)”, con un equipo que engloba a cerca de veinte personas entre investigadores, técnicos y voluntarios. 

Este proyecto, que comenzó en 2012 y se prolongará hasta el año 2017, conlleva diversas actuaciones arqueológicas en la necrópolis oriental de la ciudad hispanorromana de Baelo, una de las mejor conservadas del panorama hispano, enclavada en un atractivo paraje de la costa gaditana que se ubica entre dos parques naturales, el del Estrecho de Gibraltar y el de Los Alcornocales. Este hecho, unido a su ubicación histórica en un área militar, ha permitido un espectacular estado de conservación de los restos, sepultados en gran parte bajo la arena de la playa.

La ciudad y su necrópolis son uno de los mejores laboratorios de estudio de la romanización y de las transferencias culturales entre las poblaciones nativas, norteafricanas y los aportes itálicos a lo largo del siglo I d.C. 


SIETE NUEVOS SEPULCROS
Este verano se está desarrollando una fase de excavación arqueológica en extensión que ha ofrecido nuevos e importantes datos sobre el ritual funerario, habiéndose exhumado hasta el momento siete nuevos sepulcros. 

En paralelo, junto a la detección de la continuación de la calzada que atravesó la necrópolis, construida a mediados del siglo I d.C., en esta campaña se ha localizado un imponente mausoleo cristiano, que alberga una inhumación de un personaje relevante de la comunidad que se puede fechar inicialmente entre el siglo V y VI d.C.

TRADICIÓN BÁSTULO-PÚNICA
Este tipo de mausoleo, con una mesa de ofrendas adjunta, es el primero de esta clase que se conoce en el lugar. Sus paralelos más próximos se encuentran en los conservados en la plaza de la Almoina de Valencia y se vinculan a la sede episcopal.

Otros sepulcros de cremación previos revelan la personalidad de los habitantes de la ciudad, su conservadurismo religioso y la tradición bástulo-púnica visible en los ritos de las fases más antiguas, así como la incorporación de nuevas creencias a partir de la segunda mitad del siglo I d.C. 
"CIUDAD DE LOS MUERTOS"
Junto a las deposiciones funerarias se están excavando diversas áreas de ofrendas, restos de banquetes funerarios ubicados en zonas comunes, diversos ajuares y los trazados de los ejes viarios que conformaron, durante varios siglos, esta ciudad de los muertos.

El proyecto incluye investigación y formación. Así, junto a profesores, estudiantes y licenciados de la Universidad de Alicante, en los trabajos participan alumnos de las Universidades de Cádiz, Sevilla, Autónoma de Madrid, además de técnicos procedentes de la Université de Toulouse, de la Universidad de Murcia y de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía.

11 de septiembre de 2012

Valencia se prepara para excavar en su historia

El anuncio de próximas excavaciones en el interior de la Seo reaviva el interés arqueológico sobre la fundación de la ciudad. El subsuelo entre la Catedral y la Almoina alberga restos de las épocas romana, visigoda y árabe. 
En pleno centro de Valencia, a espaldas de la Basílica y entre la Catedral, el Palacio Arzobispal y el Almudín se sitúa el punto en el que los romanos fundaron Valentia en el año 138 a.C y a partir del cual trazaron la futura ciudad. La Almoina, hoy museo y antes solar, es el centro neurálgico de la historia de Valencia, testimonio de los vestigios más remotos de la ciudad que han ido viendo la luz en diferentes excavaciones entre los años 1985 y 2005.
La plaza de la Almoina es hoy un centro arqueológico en el que se puede
visitar los restos del antiguo foro de la Valentia romana.

Los restos arqueológicos de este museo permiten conocer cómo era el centro de la ciudad y la evolución de los edificios cercanos desde la época romana. La memoria arqueológica permite, por ejemplo, descubrir cómo fue la Catedral en los primeros siglos del cristianismo o durante la época visigoda, además de su transformación en mezquita y posterior conversión a catedral en la nueva cristianización de la ciudad.

El reciente anuncio del Cabildo de la Catedral de iniciar excavaciones para localizar la antigua mezquita y la seo visigoda dentro del proyecto de ampliación del Museo Catedralicio ha sido acogido con expectación por los arqueólogos valencianos, que califican la Seo valenciana y su entorno como una zona «muy interesante» desde el punto de vista arqueológico. Y es que los expertos son conscientes de que bajo el subsuelo de la plaza de la Virgen, la Basílica y la propia Catedral hay páginas arqueológicas de la fundación de la ciudad «todavía desconocidas», según apunta el jefe del Servicio de Investigación Arqueológica Municipal (SIAM), Albert Ribera.

De momento, el proyecto de ampliación del Museo Catedralicio y, por tanto, la intención de poder recuperar los restos antiguos está pendiente de ser aprobado por la Dirección General de Patrimonio de la Conselleria.

Discrepancias
El arquitecto de la Seo, Salvador Vila, menciona en una entrevista publicada en el último número de la revista Catedral de Valencia, «que lo mejor por descubrir está debajo del actual Museo Catedralicio y de la cripta situada bajo la actual capilla del Santo Cáliz». En este sentido, Vila precisa que bajo el museo, «en los subterráneos bajo el forjado, hay restos de la catedral más primitiva, restos visigodos y romanos, y también de la antigua mezquita, que seguramente estaba bastante próxima al crucero y presbiterio».

Sin embargo, Albert Ribera, quien ha dirigido varias excavaciones en el entorno de la Seo (entre ellas la del yacimiento de la Almoina), cree que en la zona apuntada por el arquitecto Vila podrían aparecer restos marginales del conjunto episcopal del siglo VII, así como ruinas de la época islámica y romana.

De hecho, durante la reforma del Palacio Arzobispal los arqueólogos se toparon con un pórtico que podría atribuirse a la antigua mezquita musulmana,que sigue siendo «la gran incógnita», puntualiza Ribera. De ella se conoce que correspondería con el actual transepto de la Catedral y que el lugar en el que se encuentra la actual puerta románica o de la Almoina sería el mihrab, que es el punto hacia el que han de mirar los que oran y también alberga el Corán. Una mezquita que, con las sentencias coranicas en las paredes, persistiría hasta el año 1262 cuando se demolió y construyó una catedral de nueva planta, que tardó varios siglos en finalizarse.

Otro de los puntos que apunta el jefe del SIAM como zona en la que podrían aparecer restos visigodos es el subsuelo de la plaza ubicada entre el museo de la Almoina y la Catedral. En este punto, según Albert Ribera, y en caso de realizarse excavaciones, saldrían a la luz restos del altar de la catedral visigoda y la tumba de San Vicente.

A la puerta de los Hierros de la actual Seo y a la Basílica, en la parte recayente a la plaza de la Virgen, corresponderían restos de la época romana, en concreto, la muralla y el foro, respectivamente.