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25 de mayo de 2020

La Junta aprueba el estudio arqueológico del talud del castillo de Castro del Río

El estudio arqueológico en el talud nororiental de la fortaleza cordobesa tendrá un presupuesto de 75.229 euros y supondrá el paso previo a la recuperación del trazado de la muralla.
Castillo de Castro del Río.
La Comisión Provincial de Patrimonio de la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico, presidida por la delegada de Fomento, Infraestructuras, Ordenación del Territorio, Cultura y Patrimonio Histórico, Cristina Casanueva, ha aprobado el proyecto para la consolidación del talud del Castillo de Castro del Río solo en cuanto al estudio arqueológico del talud y a la consolidación de los elementos del recinto amurallado.

Para continuar con las actuaciones sobre el castillo que ha acometido en los últimos años el Ayuntamiento de Castro del Río, se plantea ahora una intervención en el ángulo nororiental del recinto norte. Se trataría de llevar a cabo un trabajo de consolidación sobre el talud recayente a la calle Coso, ya que las estructuras defensivas prácticamente han desaparecido en superficie.

La intervención que ahora se proyecta contempla el reforzamiento del muro de contención existente en la calle Coso y el estudio arqueológico del talud, con el fin de analizar las estructuras enterradas. El proyecto conlleva a su vez la consolidación de los restos de muralla conservados y reducir los empujes del terreno. La cota máxima estimada de investigación arqueológica está entre -1,50 y -2,00 metros y cuenta con un presupuesto general de 75.229,32 euros.

La Comisión de Patrimonio considera plenamente justificada la decisión de realizar una intervención arqueológica en el talud con el doble objetivo de rebajar el nivel de tierras susceptibles de deslizamiento e investigar los restos del recinto amurallado y otros vestigios de interés. En función de los resultados de esta investigación, según la comisión, podría abordarse la recuperación del trazado de la muralla, tanto para mejorar la legibilidad del recinto como para ayudar a la contención de tierras del talud. La autorización del nuevo muro de contención queda pospuesta hasta que se ejecute la citada intervención arqueológica.


FORTALEZA DE LOS SIGLOS XIII y XV
El Castillo y recinto amurallado de Castro del Río tienen la consideración de Bien de Interés, están inscritos en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz y tienen un entorno de protección constituido por las parcelas y espacios que los circundan hasta 50 metros en suelo urbano.

El castillo ocupa un promontorio en el borde este del antiguo recinto de la Villa, en la parte más alta de la población, y en el extremo oriental del recinto amurallado, flanqueando una de las puertas de la población (Puerta de Martos). Se trata de una fortaleza construida en su mayor parte entre los siglos XIII y XV, en parte sobre una anterior alcazaba islámica.

Se encontraba cercado por edificaciones; a finales del siglo pasado se demolieron las del oeste, resultando junto con la plaza de San Rafael un amplio espacio libre para el acercamiento al monumento. La calle Coso (que continúa en la Cuesta de Martos) corresponde al acceso a una de las puertas del recinto de la Villa, hoy desaparecida. La trama urbana del entorno se construye mayoritariamente con viviendas de construcción tradicional popular –en parte renovadas- de dos y tres plantas de altura.

El conjunto del actual castillo se compone de un cuadrilátero con torres en las esquinas, que alberga un patio de armas, de 25 por 20 metros aproximadamente. Al norte se desarrolla otro recinto o barbacana que no presenta restos de torreones y parece ser una ampliación posterior. En general, la fortaleza presenta un aparejo formado por mampostería en la base y tapial en la parte superior, a veces reforzado con ladrillo.

25 de noviembre de 2016

Un estudio confirmará el hallazgo del anfiteatro de Torreparedones

Las fotografías aéreas determinan que el yacimiento arqueológico de Torreparedones podría albergar un anfiteatro. Según explicó ayer el arqueólogo municipal, José Antonio Morena, el estudio realizado sitúa este espacio fuera de la ciudad romana, en una finca privada del término municipal de Castro del Río.
José Antonio Morena destacó la necesidad de una prospección geofísica y sondeos de trinchera en la zona.
Morena, que se mostró prudente, añadió que los estudios deben confirmarse con una prospección geofísica y completarse con unos sondeos de trinchera. Según el arqueólogo, el estudio de Monterroso sitúa este espacio a unos 180 metros al oeste de la puerta occidental de la ciudad. También aporta las medidas del óvalo, con una altura de ocho metros y unas dimensiones de 79 metros de longitud y 64 de anchura. Se sitúa en una hondonada en la que no se aprecia nada sobre el terreno, por lo que no estaría hecho con sillería ni con cemento romano, sino con mampostería. Recordó que en el 2011 se produjo el hallazgo en la curia del fragmento de un casco de gladiador «que ahora tendría sentido porque en el anfiteatro es donde luchaban».

COLABORACIÓN
El alcalde de Baena, Jesús Rojano, dijo que el estudio de este posible hallazgo de cierta magnitud en el yacimiento arqueológico de Torreparedones nos permite establecer la colaboración entre las dos administraciones, los ayuntamientos de Castro y Baena y anunció que buscarán fórmulas de colaboración tanto para la puesta en valor del anfiteatro como para la incorporación al resto del yacimiento.


Para Rojano, se constata que el yacimiento «no es ni de Baena ni de Castro, sino de la comarca», que supone un motor de desarrollo para el territorio y considera muy positivo que «establezcamos las líneas de colaboración entre las dos administraciones» que permitan mayores recursos, mejor gestión y «la gestión conjunta» de Torreparedones.

Cree que es una oportunidad histórica tanto por el hallazgo como por la colaboración conjunta y ahora hay que estudiar la forma de colaboración desde el punto de vista jurídico y administrativo para que «podamos sacarle el mejor fruto y provecho». Eso sí, Jesús Rojano señaló que en el supuesto anfiteatro «la iniciativa debe ser de Castro porque Baena es difícil que invierta en ese término».

EXPLORACIÓN DE DOS HECTÁREAS
Por su parte, el alcalde de Castro del Río, José Luis Caravaca, destacó la apuesta de ambos ayuntamientos por un «trabajo mancomunado». Caravaca reconoció el «importantísimo papel del Ayuntamiento de Baena a lo largo de estos últimos diez años con una apuesta decidida y valiente para la puesta en valor del parque». Anunció que el Ayuntamiento de Castro asume el estudio y que será la Universidad de Granada la que haga una exploración magnética de una zona de unas dos hectáreas para confirmar la hipótesis de la existencia de esta gran estructura ovalada. «A nadie se le escapa el atractivo que tiene para el turismo un edificio de esta características, que por su dimensiones es comparable al de Segóbriga, en Cuenca». Para el primer edil castreño, este descubrimiento abre un camino para trabajar «unidos» en torno al objetivo común de incrementar esta riqueza patrimonial y apostar por un plan institucional entre ambas administraciones.

El Ayuntamiento de Castro del Río ya ha establecido contacto con empresas especializadas para llevar a cabo la exploración magnética en una zona de dos hectáreas tras la cual, si se «apuntalase la existencia de esta gran estructura ovalada, conduciría a la adquisición del terreno en que se sitúa el mismo por parte del Consistorio castreño» y, a partir de ésta, daría comienzo el proyecto de excavación del anfiteatro, que según la estimación técnica abarca un espacio de 77 metros por 65 metros, tiene una altura aproximada de ocho metros y su aforo ronda las 5.000 personas, informa Francisco Cañasveras.

9 de enero de 2015

A juicio una red que traficaba con cientos de piezas arqueológicas expoliadas

Uno de los cinco procesados vendía los objetos en su tienda de antigüedades de Jaén. En los registros de domicilios en las localidades de Castro del Río y Baena (Córdoba), Jaén y Cadrete (Zaragoza) los agentes encontraron monedas de diversas épocas, vasijas, mosaicos, flechas de sílex, collares, máscaras y anillos; espadas, grabados y hasta fósiles. 
Foto de archivo de piezas intervenidas en un registro domiciliario en Mancha Real (Jaén). FOTO: EUROPA PRESS
Estas son algunas de las centenares de piezas arqueológicas intervenidas por la Brigada de Patrimonio Histórico de la Comisaría General de Policía Judicial a los cinco miembros de una red dedicada al tráfico de piezas arqueológicas que desarrollaba su ilícito negocio desde la provincia de Córdoba, fundamentalmente. La Fiscalía solicita un año de cárcel para cada uno como presuntos autores de un delito de receptación.

Según relata el Ministerio Público en su escrito de conclusiones provisionales, la actuación de los agentes se produjo tras la interceptación del teléfono de uno de los encausados, J.L.M.T., tras las fundadas sospechas de su posible vinculación con una organización dedicada a la manipulación y venta ilícita de piezas arqueológicas procedentes de distintos yacimientos del territorio nacional.

UNA TIENDA DE ANTIGÚEDADES EN JAÉN
Las pruebas recabadas tras el «pinchazo» permitieron las escuchas de otros dos números: el de J.C.A.G., empresario con una tienda de antigüedades abierta en Jaén y dedicado a la venta de objetos antiguos. Y el teléfono de F.S.A., socio de los otros dos procesados e involucrado en la trama.

Así, los agentes pudieron determinar que este último «ha mantenido una estrecha relación con J.L.M.T., quien se encargaba de la obtención del género, mientras que F.S.A. se ocupaba de su preparación y comercialización. También han colaborado juntos en labores de búsqueda y han compartido beneficios de las piezas comunes y su venta, para lo cual disponían de una cuenta corriente común», recoge la Fiscalía en su escrito.

El seguimiento efectuado por los efectivos de la Brigada de Patrimonio, tanto telefónico como personal, les llevó a la identificación de los otros dos componentes de la organización y su inculpación como supuestos colaboradores en la distribución o descubrimiento de objetos arqueológicos y paleontológicos.

Con todos los cabos atados, los agentes llevaron a cabo la entrada y registro en diversos domicilios de las localidades de Castro del Río y Baena (Córdoba), Jaén y Cadrete (Zaragoza). En estos inmuebles -uno de ellos, la tienda de antigüedades de J.C.A.G. - se incautaron de una gran cantidad de piezas de diversas épocas, sobre todo monedas, además de fíbulas, hebillas, clavos, lucernas, vasijas, colgantes de símbolos fálicos o fotos de colecciones arqueológicas. Incluso encontraron un decálogo de actuación ante una posible denuncia de agentes de la autoridad.

(Fuente: ABC)