google.com, pub-4869754641634191, DIRECT, f08c47fec0942fa0 La Bitácora de Jenri: Alberto Lorrio Alvarado
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14 de noviembre de 2023

Finaliza la segunda campaña de excavación en el yacimiento íbero de Los Saladares, en Orihuela (Alicante)

La campaña de este año ha consistido en excavar la vivienda del Bronce Final descubriéndose por debajo de ella un basurero de cronología ligeramente anterior y en la zona baja se terminó de excavar la vivienda orientalizante descubierta en 2021, delimitándola completamente.
Visita, este lunes, al yacimiento de Los Saladares. Eva Moya

El Ayuntamiento de Orihuela ha culminado la segunda fase de actuaciones en el Yacimiento de Los Saladares con la protección y consolidación de éste. Las concejalías de Patrimonio Histórico y Medio Ambiente, que dirigen Matías Ruiz y Noelia Grao respectivamente, han anunciado este lunes que uno de los objetivos será la complementación del BIC, ya declarado, con la redacción del Plan Director.

El concejal de Patrimonio, Matías Ruiz, ha explicado que el yacimiento arqueológico de Los Saladares fue objeto de varias campañas de excavaciones arqueológicas en los años 70 del pasado siglo, en ellas se puso de manifiesto la importancia del factor fenicio en el proceso de iberización y el nacimiento de la cultura ibérica, por ello se convirtió en un importante referente en la arqueología nacional. En 1978 fue declarado monumento histórico-artístico y arqueológico de carácter nacional, Bien de Interés Cultural de acuerdo con la Disposición Adicional Primera de la Ley 13/1985, de 15 de junio, del Patrimonio Histórico Español.

A pesar de ello, con posterioridad, sufrió múltiples agresiones mediante el abancalamiento para su uso agrícola y la extracción de gravas, trabajos que fueron paralizados en varias ocasiones por el Ayuntamiento de Orihuela, lo que no impidió que el yacimiento llegase en 2019 en muy mal estado de conservación lo que motivó su compra por parte del Ayuntamiento, por un total de 54.400 euros.

En 2020 se redactó un Proyecto de Investigación del yacimiento arqueológico, dirigido por el catedrático de Prehistoria de la Universidad de Alicante, Alberto Lorrio, y financiado por la Concejalía de Patrimonio Histórico, que contempla la realización de cuatro campañas arqueológicas y de consolidación.

En 2021 se realizó la primera campaña con importantes resultados científicos. En la parte alta del yacimiento se reexcavó un importante edificio ibérico fechable en el siglo VI o V a. J.C. y una cabaña del Bronce final datada en el siglo VIII a. J.C., con unas fechaciones por C14 de 803/774 y 796/780 a.n.e. Y en la parte baja se documentó la mayor parte una vivienda orientalizante con hogar central fechada en el siglo VII a. J.C. y una esquina de una vivienda ibérica fechada en entre los siglos IV-III a. J.C.

La segunda campaña, realizada este año ha consistido en terminar algunas cuestiones planteadas en la campaña anterior, así en la zona alta se terminó de excavar la vivienda del Bronce Final descubriéndose por debajo de ella un basurero de cronología ligeramente anterior y en la zona baja se terminó de excavar la vivienda orientalizante, delimitándola completamente.

Pero las actuaciones más importantes han sido las de protección y consolidación. Se ha protegido totalmente la zona excavada situada en el bancal inferior y se ha consolidado el edificio ibérico de la zona alta, trabajos estos últimos que han corrido a cargo de la empresa Alebus. Para el conjunto de las actuaciones se ha contratado a la Universidad de Alicante por un total de 18.148,79 euros, IVA incluido

Con esta actuación se inicia la consolidación de las estructuras de una parte importante del yacimiento de cara a su puesta en valor, en sucesivas campañas se irán documentando y consolidando nuevas estructuras arqueológicas. Por su parte, el Ayuntamiento pretende incidir en aspectos legales importantes para la conservación del yacimiento como son la complementación del BIC, la redacción de un Plan Especial de Protección tal como establece el artículo 39 de la LEY 4/1998, de 11 de junio, de la Generalitat Valenciana, del Patrimonio Cultural Valenciano.

En el olvido hasta 2019
En este sentido, el jefe del Servicio Territorial de Cultura, José Antonio López, ha expresado la satisfacción que supone para la Generalitat Valenciana la puesta en valor de un elemento del patrimonio cultural en el territorio valenciano como es el Yacimiento de Los Saladares que estaba en el olvido y que gracias al Ayuntamiento, desde 2019, está en candelero. La actividad realizada ha estado consensuada desde el primer momento con la Conselleria de Cultura. «La investigación arqueológica es muy importante desde el punto de vista científico pero su puesta en valor lo es más porque supone la justificación del dinero público que repercutirá en la sociedad oriolana», ha señalado López.

Junto a esto ha explicado que el yacimiento arqueológico tiene ya la máxima protección al ser BIC, pero necesita una complementación para declarar su entorno que marcará los usos permitidos en éste y en el propio yacimiento. «Si además viene acompañada de la redacción de los planes especial y director, el proyecto estaría cerrado y será todo un ejemplo para seguir», ha concluido.

La tercera fase de trabajos, según ha explicado, el concejal Matías Ruiz se está ya planificando de cara a la primavera del año que viene «porque es cuando la meteorología es mejor y, en segundo lugar, porque será cuando tengamos presupuestos, donde ya tenemos previstos estos nuevos trabajos que continúan lo que se empezó en 2019». El Plan Director, por su parte, las previsiones que maneja Ruiz es que esté a lo largo de 2024, que será dijo cuando pueda salir a licitar su redacción.

En la visita realizada este lunes los ediles de Patrimonio Histórico y Medio Ambiente han estado acompañados de José Antonio López, jefe del Servicio Territorial de Cultura de la Generalitat Valenciana; Isabel Beltrán Rico, directora del Secretariado de Estructuras para la Investigación de la Universidad de Alicante; Alberto Lorrio, director de la excavación y catedrático de Prehistoria de la Universidad de Alicante; María del Carmen Sánchez, arqueóloga municipal y el arqueólogo Emilio Diz.
(Fuente: La Verdad)

22 de julio de 2015

Los arqueólogos sacan a la luz nuevas estancias en el yacimiento de la Penya Negra, en Crevillent (Alicante)

Las excavaciones han permitido descubrir una sala dentro de una vivienda que ayudará a identificar la importancia de este núcleo urbano donde convivieron tartesios y fenicios hasta el S. VI a.C.
Penya Negra fue un núcleo comercial muy destacado hasta el S. VI d.C que fue abandonado. FOTO: INFORMACIÓN.
Crevillent sigue excavando el yacimiento arqueológico de la Penya Negra, un antiguo poblado donde convivieron tartesios y fenicios hasta el siglo VI, periodo denominado bronce final o del hierro antiguo.

Según Alberto Lorrio Alvarado, catedrático de Historia en la Universidad de Alicante y doctor en Prehistoria, la importancia que este poblado alcanzó en su día fue notable, puesto que llegó a ser «un núcleo comercial muy destacado debido a su localización. La Penya Negra sirvió de lugar de redistribución comercial porque está en una zona de paso». En él se han encontrado «platos, joyas y evidencias de una orientalización en la forma de vestir, la gente adoptó la moda de Oriente próximo, es decir, las zonas que ahora conocemos como Siria, Palestina, etc...», explicó el profesor, quien indicó que eso evidencia la importancia comercial y comunicacional del poblado.

ABANDONADO SIN RAZÓN APARENTE EN EL S. VI a.C.
Fue en el siglo VI a.C. cuando la Penya Negra se abandona «sin ninguna razón aparente», según Lorrio, quien añadió que «hemos encontrado hasta incluso un tesoro oculto, lo que significa que nadie se preocupó en volver para recuperarlo». Y es que dicho siglo, tal y como manifestó el experto, significó una época de «inestabilidad en el Mediterráneo» en el que la Penya Negra quedó a su suerte mientras la ciudad de Illice (la actual Elche) «se convierte en el núcleo urbano y ciudad ibérica y romana más importante de la zona».

A pesar de que los yacimientos no se empezaron a excavar hasta los años 70, en los años 50 ya se tenían nociones de su existencia. «Las excavaciones como tal empiezan en el año 1977 hasta 1987, dirigidas por el profesor de Historia de la UA Alfredo González Prats», afirmó Alberto Lorrio. «La actividad continuó hasta finales de los 90, cuando se pararon las investigaciones, porque ya no había un interés social por los yacimientos» señaló.

PROCESO ACTUAL
El profesor destacó que las antiguas excavaciones se encontraban en un estado muy degradado, «debido al paso de tiempo, los robos y las expoliaciones», pero que de todos modos han conseguido «identificar una nueva estancia en una de las viviendas que se encontraron». La actual excavación lleva activa desde el día 28 de junio y durará hasta el 30 de julio, haciendo una parada en el mes de agosto debido a las temperaturas, que dificultan enormemente el trabajo de los arqueólogos.

En septiembre se retomará el trabajo de investigación para desvelar el misterio de por qué se paralizó la vida urbana en la Penya Negra, en un proyecto que ha sido financiado con una ayuda de 15.000 euros, al igual que el año pasado, provenientes de la Generalitat Valenciana.
(Fuente: Diario Información / Carmen Asensio)